21 semanas de embarazo
Aunque el bebé ahora pesa alrededor de medio kilo, tu pequeño todavía tiene mucho espacio en tu vientre. ¡Y le gusta usarlo cuando no está dormido! Lee más sobre esta semana.
Aunque el bebé ahora pesa alrededor de medio kilo, tu pequeño todavía tiene mucho espacio en tu vientre. ¡Y le gusta usarlo cuando no está dormido! Lee más sobre esta semana.
Llegaste a la mitad de este viaje, tu hijo sigue en continuo desarrollo dentro de ti y algunos de tus síntomas van desapareciendo para darle paso a otros. Tu cuerpo está viviendo cambios significativos y durante las 21 semanas de embarazo suceden cosas sorprendentes que te enamorarán cada día más de tu bebé.
Desarrollo del bebé en las 21 semanas de embarazo
En esta etapa, el bebé tiene aproximadamente 26 centímetros y pesa alrededor de 360 gramos. Su cuerpo se va acomodando, con extremidades y cabeza en tamaño adecuado. Es probable que sientas movimientos fetales intensos y regulares pues el feto está cada vez más activo dando patadas, girando y estirándose dentro del útero. A medida que avanza el embarazo, se volverán muy perceptibles.
Los sentidos del gusto y el olfato del feto siguen desarrollándose esta semana y son estimulados ligeramente por tu líquido amniótico ya que lleva a él las moléculas aromáticas de lo que comes. Por lo tanto, al nacer, tu bebé ya se sentirá atraído por el olor de tu piel, tu leche e incluso, puede que más adelante se familiarice con los alimentos que consumiste regularmente al final del embarazo.
El cerebro del bebé sigue creciendo rápidamente. Se forman nuevos pliegues y surcos en su superficie, lo que aumenta la capacidad cerebral y le permite desarrollar habilidades cognitivas más avanzadas.
¿Cómo te sientes?
En esta etapa del embarazo, tu bebé flota en abundante líquido amniótico, el cual se repone a menudo. Es posible que ahora comprendas por qué es importante beber mucha agua. Tu patrón de respiración también cambia, se hace más frecuente y, a veces, puede parecer que te falta el aliento.
Esto puede deberse al aumento de peso, pero también al cambio en el cuerpo, ya que a medida que tu bebé crece, sus órganos tienen cada vez menos espacio. Si te preocupa tu respiración, asegúrate de consultar con tu profesional de la salud.
Nutrición
Además de las proteínas, el ácido fólico, el zinc, el DHA, yodo y la vitamina A, es importante el consumo de la B12. Se encuentra principalmente en alimentos de origen animal como la carne, el pescado, los huevos, la leche y el queso, las veganas deben prestar mayor atención para cumplir con sus recomendaciones dietéticas.
Si eres vegana, puedes encontrarla en alimentos fortificados con vitamina B12, como algunos cereales para el desayuno y levadura nutricional. Consulta el empaque y asegúrate de informarle a tu médico tratante.
No olvides el ácido fólico, que ayuda a prevenir defectos del tubo neural en el bebé y se encuentra en alimentos como espinacas, brócoli, lentejas y cereales fortificados. El hierro es esencial para la formación de glóbulos rojos que lo comes en las carnes magras.
Durante las 21 semanas de embarazo, es importante evitar ciertos alimentos que pueden representar un riesgo de contaminación o infección, como carnes crudas o poco cocidas, pescados de agua dulce crudos, quesos blandos no pasteurizados y embutidos no cocidos.
Consejos
¿La indigestión te incomoda? Un efecto secundario desagradable y bastante común del embarazo, los cambios hormonales hacen que la abertura superior del estómago sea floja. Esto facilita que el ácido entre en el esófago y cause esa sensación molesta. ¡Cuánto más grande es el niño, la presión de la parte abdominal es mayor!
Un cambio en los hábitos alimenticios puede ser útil: prueba cinco comidas pequeñas al día en lugar de tres grandes y asegúrate de masticar bien. Si sufres de indigestión por la noche otro truco es apoyar la cabeza para que el ácido no pueda subir tan fácilmente.
Beber suficiente agua es esencial durante el embarazo. Mantente bien hidratada y evita las bebidas azucaradas o con cafeína en exceso. En lugar de tres comidas grandes al día, es recomendable optar por más pequeñas y frecuentes para evitar la sensación de hinchazón y acidez estomacal.
Sigue estos consejos adicionales si llegaste a las 21 semanas de embarazo:
- Cuidado prenatal: continúa asistiendo a todas tus citas con tu médico. Es importante realizar los exámenes y pruebas necesarios para asegurarte de que tanto tú como tu bebé están sanos.
- Ejercicio regular: si tu médico lo aprueba, continúa realizando ejercicio moderado de manera regular. Te ayudará a mantener tu salud y bienestar durante el embarazo. Opta por actividades de bajo impacto como caminar, nadar o hacer yoga prenatal.
- Descanso adecuado: asegúrate de dormir lo suficiente en la noche y, si es necesario, toma siestas cortas durante el día. Utiliza almohadas adicionales para mayor comodidad y apoyo mientras duerme.
- Cuidado de la piel: conforme tu vientre crece, es posible que sientas picazón o secuela en la piel. Aplica una crema o loción hidratante para mantenerla suave y aliviar cualquier malestar.
- Evita el estrés: busca formas de manejar el estrés, ya que puede tener un impacto en tu bienestar general y en el desarrollo del bebé. Prueba algunas técnicas de relajación como la respiración profunda, la meditación o el yoga.
Sigue disfrutando el tiempo que viene, aunque todavía falta un largo camino, la llegar a las 21 semanas de embarazo es un gran paso. Siente como tu bebé crece dentro de ti y comienza a preparar todo para su llegada.